Desde Tailandia a Escocia se celebran las fiestas de difuntos en meses distintos de noviembre, y se reparten por el calendario a lo largo del año, parece que no hay acuerdo al respecto y eso también forma parte de la diversidad de este mundo nuestro.
Así es, comencemos por la exótica Tailandia que tiene uno de los festivales más pintorescos recomendado incluso en las guías turísticas, algo poco habitual de encontrar en ese tipo de guías. Tiene su origen en una leyenda y se localiza en la provincia de Loei. Se celebra en el mes de junio, y se celebra aprovechando el monzón y así pedir un buen año de lluvias.
Lo más típico de esta celebración es los vestidos y disfraces de los participantes, que le ponen mucha creatividad especialmente a las mascaras que lucen, llenas de colores; todo ello durante tres días, realizando procesiones, rezando y presentándose en los templos.
Si nos desplazamos por la misma zona del mundo, en Camboya encontramos la fiesta de Pchum Ben que tiene lugar el decimoquinto día del décimo mes del calendario jemer, coincidiendo con la finalización de la festividad budista Vassa, este año será el 27 de septiembre por lo tanto es una fecha que varía cada año. La celebración tiene lugar durante 15 días y es el decimoquinto el principal.
Es el momento en qué muchos camboyanos recuerdan a los familiares fallecidos hasta nada menos que 7 generaciones atrás. Los monjes cantan “sutras” en lengua pali durante toda la noche, prácticamente no duermen en toda la noche, como preludio de la apertura de las puertas del infierno.
En Filipinas, el centro de la celebración del día de los muertos es el cementerio y se celebra el 1 de diciembre. En ese aspecto coincide con la forma en que celebran en México la fiesta de difuntos. Además, coinciden en realizar ofrendas de comida en un banquete, luego todo queda perfectamente limpio y se dejan flores a los difuntos.
Continuamos en China, donde la celebración del Festival Zhongyuan tiene un origen similar al de Tailandia, o viceversa, en su cultura el decimoquinto día del séptimo mes en el calendario lunar es llamado el Día del Fantasma y el séptimo mes completo es considerado el mes del fantasma, en el cual fantasmas y espíritus, incluidos los ancestros fallecidos, salen del inframundo.
La celebración consiste en preparar comida, quemar incienso, preparar cosas como ropa elaborada con papel maché, incluso oro y productos finos que agraden a los espíritus. Durante los banquetes de comida vegetariana casi siempre, se deja una silla vacía por cada familiar fallecido, tratándolos como si estuvieran vivos.
Como se puede ver hay ciertas coincidencias en las celebraciones, aunque no sean de la misma zona geográfica, ya que la comida aparece en China o Tailandia como en México y Perú, y obviamente se trata en todas ellas de honrar a los muertos y recordarles durante un tiempo al año, variable en días dependiendo del país. Y por supuesto, sin que esto se produzca en la misma fecha en todos los países, aunque si es cierto que entre el 31 de octubre y el 2 de noviembre se celebran la gran mayoría.